En qué consiste la ciática
– La ciática se advierte en la pierna que se utiliza más. En la pierna derecha, en el caso de las diestras, y en la izquierda, en las zurdas. El nervio ciático permanece “atrapado” por la musculatura de la pelvis, que, durante el embarazo, tiende a sufrir contracturas.
– El trastorno es más frecuente en la segunda mitad del embarazo. En este período, el peso y el tamaño del útero aumentan y la mamá tiende a impulsar la pelvis hacia delante, para mantener mejor el equilibrio. Esto hace que adopte posturas que no siempre son correctas.
– Hay mujeres más expuestas que otras. Las que han sufrido el trastorno en un embarazo anterior, o las que tienen algún defecto en la columna, por ejemplo, escoliosis.
Cómo evitar que vuelva a manifestarse
Puedes tomar ciertas medidas que seguro te ayudarán a aliviar el dolor de la ciática:
- Utiliza una faja especial para embarazadas. Esta prenda es muy útil para ayudar a soportar el peso del abdomen sin sobrecargar tanto los músculos y los nervios.
- Acude al fisioterapeuta. Si los dolores son muy acentuados, siempre puedes acudir a un especialista para que te ayude a aliviar el dolor. Además de las técnicas que pueda aplicarte para reducir el malestar, también puede sugerirte diversos ejercicios a realizar durante las épocas sin dolor para así fortalecer los músculos de la espalda.
- Vigila tu postura. La forma que empleas para sentarte o incluso tumbarte puede resultar esencial para aliviar la ciática. También, es muy importante que te acostumbres a realizar determinados gestos de forma correcta.
- Trata de no aumentar excesivamente de peso. Los kilos de más durante el embarazo incrementan la posibilidad de que el nervio ciático se comprima.
- Evita el sedentarismo. A menos que sea algo totalmente necesario por recomendación médica, procura no pasar el día sentada. Apuesta por realizar ejercicios moderados como el yoga de forma regular, al menos tres veces por semana. Incluye ejercicios que te ayuden a fortalecer los músculos de la espalda y las piernas, como por ejemplo la natación.
- Calza zapatos cómodos y sin tacón. Trata de que tu calzado no incremente las molestias de la espalda durante este periodo.
- Apuesta por los masajes. Los masajes en la zona dolorida son recomendables siempre y cuando los aplique un especialista. Un masaje mal dado puede provocar más dolor. Además, es importante evitar los masajes en la región lumbar, ya que estos pueden dar pie a contracciones uterinas.
- Pásate a la acupuntura. Esta técnica puede suponer un alivio a los síntomas de la ciática, sobre todo cuando se aplica en conjunto a otros tratamientos.
- Pasea con moderación. Los paseos son un excelente ejercicio durante el embarazo, pero con problemas de ciática resulta aconsejable reducir su duración.
- Haz estiramientos. Existe toda una serie de estiramientos específicos para la zona de espalda, piernas y glúteos que puede ayudarte a disminuir la compresión del nervio ciático.
- Aplica calor. El calor seco aplicado en la zona de dolor puede ayudar a aliviar los episodios más agudos, ya que relaja los músculos y ayuda a disminuir los espasmos musculares.
Fuente: clubfamilia.com, mibebeyyo.